"Entendiendo juntos el desarrollo a través de la acción colectiva"

Hola, es grato tenerte visitandonos, en este blog podrás compartir conocimientos sobre economía y políticas públicas que nos permitan construir un mundo mejor ...

martes, 29 de junio de 2010

Las Redes Sociales y el Desarrollo Local

El desarrollo local puede ser entendido como un proceso de crecimiento y cambio estructural, que se basa en la identificación y aprovechamiento de los recursos y potencialidades endógenas bien sea de una ciudad, provincia o región estas potencialidades se pueden circunscribir en el ámbito económico y/o no económico. Más puntualmente el desarrollo local se puede definir como el proceso de transformación de la economía y de la sociedad local, orientado a superar las dificultades y retos existentes, que busca mejorar las condiciones de vida de su población mediante una acción decidida y concertada entre los diferentes agentes socioeconómicos locales, públicos y privados, para el aprovechamiento más eficiente y sustentable de los recursos endógenos existentes, mediante el fomento de las capacidades de emprendimiento empresarial local y la creación de un entorno innovador en el territorio. En este enfoque también se considera la importancia del capital social y los enlaces de cooperación con agentes externos para capturar recursos humanos, técnicos y monetarios, entre otros, que contribuyan a la estrategia local de desarrollo (Pike, 2006). Es por esto que no es desacertado considerar las redes sociales como generadores de desarrollo local. Las redes sociales se pueden definir como sistemas de auto-organización es decir que surgen y se conforman por iniciativa propia, además se caracterizan por su flexibilidad y no responden a jerarquías, además permiten la comunicación trasversal es decir entre diferentes niveles y en diferentes sentidos.

Por otra parte, las redes permiten contrastar ideas y visiones sobre temas globales y complejos que, aunque forman parte del territorio, encuentran su solución en relaciones de poder, en círculos de influencia que van más allá de la frontera territorial o de la órbita pública local. Se pueden encontrar una gran diversidad de redes atribuible tanto a su condición multidimensional (en cuanto a áreas temáticas, objetivos y líneas de acción), a los actores involucrados (socio-territoriales, empresariales, político administrativos o de cooperación internacional), al tipo de intercambios entre éstos, a la articulación entre nodos y demás componentes de la red, así como a la cobertura territorial y el rol identitario determinado por estas variables

La identidad juega un papel fundamental dentro de las redes, y no constituyen un impedimento para la búsqueda del desarrollo local, por el contrario como lo establece José Arocena: “la identidad es una de las dimensiones claves del desarrollo. En ellas se reúne el pasado, el presente y el proyecto en una única realidad interiorizada por el conjunto de miembros de la sociedad; se desarrollan en una realidad cultural en la que se valoran la innovación, el trabajo y la producción; marcan la diferencia”

El desarrollo local supone instituciones locales vigorosas, asociación de intereses, búsqueda de un futuro compartido y diseño de estrategias que permitan el desarrollo local. En este sentido es que toma importancia la construcción de capital social, de allí que el papel de las redes sociales, que no supone actores semejantes, sino diversos, que sean capaces de proponer ideas que apunten hacia la búsqueda de un bien común, la búsqueda de un desarrollo localizado.
Por Gissela Nuñez

1 comentario:

monica dijo...

Bien, pero ¿qué sucede con las comunidades que han sido excluídas en terminos sociales y económicos? ¿en qué medida la discriminación racial y la exclusión social que viven las comunidades afrodescendientes, no las mantienen en redes sociales limitadas sin vínculos externos?

Aunque evidentemente, la promoción del capital social contribuye al desarrollo local, es posible que en zonas marginadas del territorio nacional no pueda hallarse este tipo de capital; o peor aún, las redes sociales que se encuentran corresponden al capital social "negativo" bajo el cual son las redes clientelares, los contratos incompletos y la búsqueda de rentas individuales las que caracterizan las relaciones sociales y el devenir económico de los territorios.